Una firma viguesa llança una assegurança de llar anti-okupes (ABC Galicia)
29.05.20
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La Guardia Civil señala las webs inmobiliarias como herramienta para okupar casas de lujo
SANTIAGO Actualizado:
La okupación de una vivienda implica a menudo un verdadero viacrucis judicial para los propietarios del inmueble, impotentes ante la burocracia para recuperar su casa y la dilatación de los tiempos, que se acrecienta de cara a la temporada estival. Sabedores del temor de muchos al echar la llave para irse de vacaciones, una correduría viguesa ha diseñado un seguro de hogar pionero en España que protege ante la entrada de desconocidos. El producto, impulsado por el Grupo Alvariño, blinda tanto las primeras viviendas como las segundas residencias.
Sus creadores recalcan que se trata de un producto novedoso que permitirá cubrir los gastos de defensa jurídica derivados de la reclamación para la recuperación del bien inmueble, así como de la reclamación de los daños ocasionados a la vivienda o local durante la ocupación. Este nuevo seguro «anti-okupas» está destinado a la protección de viviendas, «tanto de primera como segunda residencia, así como a locales o cualquier otro tipo de inmueble, incluyendo también todas sus dependencias y terrenos anexos», explican.
En caso de que la okupación se produzca, el seguro garantiza la cobertura de los gastos por las tasas, derechos y costas judiciales derivadas de la tramitación de los procedimientos cubiertos o, en su caso, los del procedimiento de mediación. El pack también incluye los honorarios y gastos de abogado y procurador, los gastos notariales y de otorgamiento de poderes para pleitos, así como las actas, requerimientos y demás actos necesarios para la defensa de los intereses del asegurado.
El lanzamiento de este seguro coincide en el tiempo con la investigación iniciada por la Guardia Civil a raíz de la okupación de dos viviendas de lujo en el barrio coruñés de A Zapateira, uno de los más exclusivos. Según la hipótesis de la Guardia Civil, los nuevos moradores dieron con una de estas mansiones por el método del «boca a boca», aunque lo normal es que las detecten en las páginas web donde se ofertan. En los dos casos investigados, las propiedades rondan los 800.000 euros y están anunciadas en portales de venta online, «una de las vías por las que las personas que acceden a viviendas no habitadas las suelen encontrar», insisten.
Sin embargo, uno de los chalés asaltado en La Coruña parece haber sido localizado de otro modo, por el boca a boca, ya que el instituto armado sospecha que un grupo de personas de una casa fue el que le comentó verbalmente al otro que había otra residencia vacía en la zona. La vivienda, muy llamativa aunque protegida por muros, pertenece a una entidad bancaria. Para los agentes no se trata de una coincidencia. Mantienen que las casas en manos de los bancos corren más riesgo porque estos «tardan mucho más tiempo que un propietario habitual en darse cuenta de que la vivienda está okupada». Como medida más efectiva, insisten en la colocación de alarmas de seguridad.