El sector de los seguros deberá observar cómo evoluciona esta situación y, como muchos sectores, también deberá adaptarse.

Probablemente parte con una cierta ventaja ya que algunos productos, sean de las propias compañías como de insurtech innovadoras, están trabajando, desde hace tiempo, en la incorporación de mecanismos de geolocalización. Mecanismos que ayudan en la prestación de servicios relacionados con el producto contratado.

Covid-19 y datos

En artículos anteriores del blog de la Correduría Inteligente se hablaba del coche conectado y de cómo los seguros de auto estaban reinventándose en beneficio tanto del asegurado como de las compañías. Una innovación tecnológica que significaba una nueva posibilidad para incorporar prestaciones al producto. Y es un caso muy claro de geolocalización tanto del automóvil como, indirectamente, del conductor asegurado. Un caso donde es probable que las reticencias al respecto de la privacidad sean menores, o cuanto menos salvables.

Por poner un ejemplo aplicable, es necesario resaltar que la actual situación de emergencia sanitaria ha provocado que los mecanismos de control pasen a manos, en algunos casos, de organismos estatales cuyo cumplimiento de la legislación de protección de datos no está, en la actualidad, nada claro.

De hecho, el cumplimiento de las normativas al respecto no está claro en ningún ámbito. Ni en el público ni en el privado. Pero en el lado público la responsabilidad que se le supone a un estado pasa por delante de otras consideraciones. En teoría…

Así, con todas las tecnologías que hacen uso del Big Data y que aplican la Inteligencia Artificial en sus procesos, es probable que se incremente la percepción de control de una privacidad individual cada vez más difícil de proteger.

Pero en el ámbito del sector, la percepción de pérdida de privacidad, o el control sobre la geolocalización del individuo se ve a veces compensado con los beneficios reales que aporta el producto. Y aquí, el asegurado no tiene una opinión mayoritaria, sino más bien práctica.

Ejemplo en los seguros de salud

Un ejemplo directamente relacionado con la actual situación y el sector lo vemos en los seguros de salud. Actualmente los nuevos productos incorporan la monitorización, a través de la biometría, de nuestro propio cuerpo. Una monitorización que persigue un cuidado más personalizado, una prevención más exacta y, en consecuencia, una póliza más adecuada a las circunstancias de cada asegurado.

Se hace difícil pensar que un asegurado con este producto tan personalizado no esté dispuesto a ser geolocalizado. O monitorizado. Hay pérdida de privacidad. Hay geolocalización. Pero hay beneficios palpables para la salud.

Sin embargo, es probable que con la actual situación se produzca un cambio en el marco normativo al respecto de la protección de datos. Pueden plantearse necesidades de interés general y sobre todo muy relacionadas con la pandemia del Covid-19. Y también es probable, aunque muy pronto para asegurarlo, que entremos en una nueva situación (algunos la llaman la “nueva normalidad”) donde perdamos el control, y parte de privacidad en aras al interés general.

Conclusión

Las corredurías deberán estar atentas al futuro inmediato. El cliente va a ser el primero que tendrá dudas al respecto y será necesario tener el máximo de información posible para ser totalmente transparente en todas aquellas cuestiones donde la privacidad de datos sufra algún tipo de modificación. Y es que es más que probable que la nueva normalidad tenga en su ADN algunas características que hace pocos meses nos parecían de ciencia ficción.


Este artículo forma parte de las Píldoras de Conocimiento del blog de la Correduría Inteligente de MPM Software que se publican con carácter semanal. Una forma clara y comprensible, de tratar todos aquellos conceptos y temáticas relacionadas con la transformación digital del sector y la innovación tecnológica en el campo de la mediación.