¿Puede la compañía aseguradora negarse a reparar mi coche? (ABC)
07.01.22
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Es importante seguir una serie de pautas para evitar los errores típicos que se comenten tras sufrir un accidente y recurrir a la aseguradora
MADRID Actualizado:
A pesar de la pandemia y de la bajada en los desplazamientos durante muchos meses de confinamiento, los accidentes de tráfico siguen en cifras alarmantes. Por ello desde la patronal UNESPA nos ofrecen cinco pautas a seguir para evitar los errores típicos que se comenten tras sufrir un accidente y recurrir a la aseguradora:
–No esperes a la oferta de la compañía: El mundo de las aseguradoras es complejo y se basa en números y estadísticas, por lo que el coste de tu accidente debe suponer lo mínimo para ellas. Por eso no se debe esperar a que la aseguradora del primer paso, ya que seguramente la propuesta de indemnización será de un importe menor y la posterior negociación partirá de mínimos o estará condicionada beneficiando a la aseguradora.
–No confíes en el abogado de la aseguradora: Cuando sufrimos un accidente, nuestra aseguradora nos asigna uno de sus propios abogados vinculado a nuestra póliza, que se encargará de reclamar frente al responsable del accidente (la otra aseguradora). Esto no sería problema, si no fuera porque hay intereses que el asegurado desconoce y que claramente le perjudican. En primer lugar, las compañías tienen acuerdos de no agresión entre ellas y da lugar a que muchas veces se pacten lesiones por el «hoy por mí» y «mañana por ti». Ante estas situaciones siempre pierde el lesionado, por lo que se recomienda buscar un abogado particular especializado en accidente de tráfico.
–No reclames por tu cuenta o por conocidos: Las aseguradoras prefieren sentarse con una persona que sepa menos que ellos, para poder dirigir y orientar la negociación allá donde más les interese sin oposición. Contar con la ayuda de profesionales en aspectos tan delicados como reclamar lesiones derivadas de un accidente, garantiza una reclamación justa.
–Conoce las coberturas de tu póliza: Los tecnicismos y las letras pequeñas hacen que no lleguemos a comprender del todo lo que incluyen nuestras pólizas de automóvil, como, por ejemplo: gastos de abogados particulares, gastos sanitarios, elección del taller… y otras coberturas que están incluidas por Ley.
Reclamar los daños
Asimismo, ¿puede la compañía aseguradora negarse a reparar mi coche? Lo primero que hay que tener en cuenta al reclamar los daños del vehículo por un accidente de circulación, del que no somos culpables, según Eurosiniestro abogados, es como tramita el siniestro nuestra aseguradora, dejando completamente indefenso a su asegurado.
«En virtud de los convenios de indemnización que tienen entre sí más del 90% de las compañías que conforman el mercado asegurador, la compañía del vehículo perjudicado va a recibir un módulo fijo de entorno a 900 euros actualmente, mediante el cual queda obligada a ponerse en contacto con su asegurado para indemnizar el importe de la reparación o del vehículo si este es siniestro total», detallan. «Por tanto la primera sorpresa que se lleva el perjudicado es que es su propia compañía, la que le valora el daño y se lo paga, cuando lo que legalmente debiera ocurrir es que nuestra compañía debía reclamar en nuestro nombre a la contraria. Evidentemente cuando quien paga es mi seguro, sin reclamar el importe pagado, yo como perjudicado quedo completamente indefenso a su merced, pues nadie independiente me asesora, como lo haría si fuese mi seguro el que reclama al contrario», añaden.
«Que suele ocurrir entonces, pues que mi seguro intentara abaratar la reparación todo lo que pueda, para cubrir la reparación por debajo de los 900 euros o en su caso excederse lo mínimo posible para que al final de año la media de todos los vehículos que ha reparado, este por debajo del módulo fijo que percibe por cada vehículo y que esto no le genere pérdidas económicas. Las formas de abaratar las reparaciones son varias, desde poner piezas de desguace hasta reparar otras en contra del criterio del fabricante, etc. pero la más habitual, es la de declarar en cuanto se pueda que el vehículo es siniestro total y por tanto este e queda sin reparar. Para ello no dudarán en argumentar que con arreglo a tablas estadísticas que el sector maneja, el supuesto valor del coche es inferior al de la reparación y por no procede reparar», concluyen.