Economia reclama a les mútues d’assegurances que accelerin les fusions (Cinco Días)
18.09.20
_
Hay más de 200 firmas de carácter mutual operando en España
La Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DGSFP), dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos que dirige Nadia Calviño, está contactando con las mutuas de seguros para pedirles que se planteen su fusión con otras entidades de la misma naturaleza. Las exigencias supervisoras y de regulación, unidas al desafío de la crisis del coronavirus, han animado esta decisión.
La DGSFP, por ejemplo, tiene competencias sobre la Mutua Segorbina de Seguros o sobre la Mutua de Seguros de la Panadería de Valencia. Aunque los datos de solvencia de la inmensa mayoría de entidades son muy sólidos, aun después de verse afectados por la pandemia y la crisis económica, el supervisor quiere que haya concentración para hacer grupos más solventes y facilitar su tarea de monitorización.
- Arquitectos. La Hermandad Nacional de Arquitectos (HNA) ha sido una de las mutuas más activas en el proceso de consolidación. En enero anunció la absorción de la mutua de aparejadores (Premaat). También se hizo con la Mutualidad de los Químicos en 2010. Además, ha reorganizado su negocio con la venta de su cartera de seguros médicos baratos, Nectar, a Sanitas.
- Pelayo. Es otro de los jugadores más relevantes del sector. En los últimos años ha crecido en el ámbito del seguro agrario. Primero con la absorción de la Mutua Rural (Mutral) y luego con una alianza con Agroseguro.
- PSN. La mutualidad de seguros generales de personal médico es otra de las entidades con más vocación de crecimiento. Hace siete años absorbió la Mutua de Licenciados y Doctores, y sus gestores siempre han mostrado la voluntad de seguir creciendo.
- Fiatc. Es la mayor mutua de seguros de Cataluña y una de las grandes del sector, con 690 millones de primas ingresadas en 2019. En 2013 absorbió Previred. Dentro de Cataluña siguen operando 30 aseguradoras de carácter mutual y Fiatc es el principal referente para la consolidación de entidades dentro de la comunidad autónoma.
“La DGS lleva muchos años tratando de que se concentre el sector. Con el Covid-19 y Solvencia II, algunas entidades pueden ir más justas. Al final, tiene sentido que haya fusiones, aunque suele haber muchos personalismos y no siempre es fácil concretar las operaciones”, explica Javier Vergés, director general de Musaat.
Dentro del mundo mutualista hay tres categorías muy diferenciadas. Están las mutualidades de previsión social, que ayudan a ahorrar para la jubilación y, en ocasiones, permiten que las cuotas pagadas equivalgan a las aportaciones a la Seguridad Social. Por otra parte están las mutuas de seguros de vida, y las mutuas de seguros generales (coches, hogar, incendios, accidentes).
Euskadi
En el primer grupo es donde hay un mayor número de entidades. En buena medida, porque en el País Vasco no existen los planes de pensiones, sino que todo el ahorro privado para la jubilación se canaliza a través de entidades de previsión social voluntaria (EPSV), que tienen un carácter mutual y están supervisadas por el Gobierno vasco. En total, hay ahorrados 22.000 millones de euros en EPSV.
En otras mutualidades de previsión social, como la de la abogacía, la de los pilotos (Loreto), la de la policía, la de los futbolistas, la del clero o la de los empleados del Banco de España, hay otros 25.000 millones de euros. También los empleados de Renault tienen su aseguradora.
“El problema es que muchas veces, por el origen gremial y el escaso tamaño, son organizaciones poco profesionalizadas, que tienen difícil hacer frente a todas las exigencias regulatorias”, explica Gustavo Caballero, responsable de mercados de capitales de Rentamarkets. En los últimos 10 años se han ido produciendo pequeñas fusiones en el sector, que han hecho desaparecer más de 70 mutuas y mutualidades. La última, la integración de la Hermandad Nacional de la Arquitectura con la mutualidad de los aparejadores (Premaat). Pero el supervisor quiere que el proceso se acelere.